Análisis sobre la forma de escribir de Rafael Chaparro Madiedo

Por: Daniel Gaona

Analizar una obra es tarea compleja, sin embargo el separarla y desglosarla podemos analizarla más detalladamente. La forma de escritura de Chaparro es interesante. Sus frases son precisas, numerativas, vertiginosas. Chaparro a lo largo de su novela utiliza una forma poco típica de escribir, enumera cosas, frases, música de una manera que genera un ambiente. Para tener una idea de esta forma un tanto aglomerante de describir el ambiente como desgarrando el espacio y soltando (inclusive a veces sin “comas”) al aire elementos que nos dan la sensación justa correspondiente a cada ambiente, bastaría con citar alguna frase: “…debajo de no me jodan nene nene qué vas a hacer cuando seas grande van a tener que hablar conmigo fotografías con brandy a las diez de la mañana prende un cigarrillo en la mitad de los dedos abre la puerta vamos al cine chúpame mátame.” Esta falta en el uso de las comas le da cierta vertiginosidad al relato y lo acelera. Por otro lado, esta misma descripción se usa con relativa frecuencia generando la sensación de constancia de ambiente y de ritmo. Asimismo, el romper con la forma típica de escribir los diálogos por separado, indicando con un pequeño guión la idea de uno u otro personaje; Chaparro lo hace de manera seguida, inclusive en la misma oración sin perder la noción de dialogo (pregunta respuesta): “… y le dijo al tipo oye nene qué putas te pasa y el tipo respondió tranquila nena no me pasa nada y entonces nos dejó entrar tranquilamente”. Lo mismo pasa con la música, se enumeran canciones que rememoran partes anteriores de la obra o que sirven para representar ambiente, la forma de introducirlos en la obra es espontánea y repetitiva, inclusive listada: “hacia esa voz ronca que desde la arena desarrollaba cielos de mermelada it was twenty years ago today Peper taught tha band to play they´ve been going in and out et style I don´t really want to stop the show uhhhh.” Realmente la forma de escritura de chaparro hace de "Opio de las nubes" un libro interesante y llamativo. Ninguno otro hace que un gato habla y que de la tristeza conteste quizá >