La somnolencia con la que vivimos cotiadinamente representa una ceguera secular que nos impide, de una u otra manera, ver que lo que se nos supone real y no es, en lo más mínimo ni siquiera sombra de lo que fue y que nadie conoce o recuerda (o quiere recordar). La verdad es que nuestro pasado cultural originario ha sido oculto disfrazado y herido de muerte en el lecho del olvido. Lo que bajo otras circunstancias sería motivo de orgullo, hoy representa vergüenza y forma parte de la lista negra de la sociedad mestiza que muchas veces se de recibir este apelativo y que una vez al año, se disfraza de extranjera y desecha su propia cultura tras pastizales de toros bravíos y zetas rumiantes. Lo que nadie recuerda, sea por olvido generalizado o por descuido popular, es que nuestra cultura actual es la mezcla de las infusiones de culturas ajenas y usurpadoras, de verdugos que con pretexto de religión y avance quemaron en la hoguera la cultura propia de los países del sol naciente; que si bien no tenían la “tecnología cortesana” o el “intelecto pizarrense” nunca estuvieron perdidos। ¿Con क़ु extraña razón llaman descubrimiento a la masacre y discriminación racial; al robo y ultraje de
sábado, 24 de noviembre de 2007
Descubrimiento o Conquista????
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